Paralelamente, el defenestrado ‘pijama’ se convertía en una de las equipaciones del Sporting más vendidas de todos los tiempos. Tras años de vinculación con la firma Astore, que habían derivado en un importante descontento por parte de los aficionados y del propio club, el Sporting parecía dar un salto de calidad al sellar un acuerdo con una firma internacional de primera línea. La primera camiseta rojiblanca, el conocido ‘pijama’ (rayas rojas mucho más estrechas de lo habitual) fue recibido con una importante pitada.