Sus dos segundas equipaciones no tendrían nada de especial si no fuera porque el próximo mes de septiembre, Escocia celebra un referéndum en el que se debatirá la independencia de la nación más septentrional del Reino Unido. De sobra es conocido que el Celtic representa a los católicos escoceses y que es todo un símbolo contrario a Gran Bretaña. El problema era que no eran blanquiazules sino rojiblancas. Sin embargo, en 2016, cuando se firmó un nuevo convenio por la remodelación, el club se comprometió a pagar el 50% de los 50 millones euros estimados inicialmente, mientras que el Gobierno Vasco pagaría diez y la Diputación de Gipuzkoa otros cuatro.
